¿A quién no le ha pasado?
Desde unos granitos en la barbilla, hasta brotes más importantes de acné en toda la zona que nos cubre la mascarilla.
La mascarilla ha pasado a formar parte de nuestras vidas y de momento es indispensable para protegernos frente al contagio del Covid19. Nuestra piel no está habituada a su uso y el acné es un fenómeno derivado del mismo, que vemos mucho en la consulta. Incluso en personas que nunca lo han padecido.
El acné por mascarilla aparece por el efecto de la oclusión del tejido sobre la piel, a lo que se suma que el aire caliente que producimos al hablar y respirar quedar retenido por la mascarilla, creando un ambiente húmedo ideal para el crecimiento de bacterias. Todo ello empeora con el sudor si además hace calor.
Es un fenómeno tan frecuente que ha pasado a denominarse maskné.
¿Cómo lo vamos a tratar?
El tratamiento del acné por mascarilla es tópico, con cremas que contengan activos que restablezcan la barrera hidrolipídica de tu piel. No debes aplicar productos ni maquillajes grasos y muy cubrientes. Es mejor optar por texturas tipo serum o ampollas. Evitar el maquillaje y utilizar un protector solar mineral.
Los productos para la noche no deben ser irritantes, por lo que vamos a desaconsejar activos del tipo retinol, ácido salicílico o glicólico y vamos a recomendarte productos reparadores.
Antes de aplicar cualquier producto es imprescindible una limpieza con productos específicos que te recomendaremos. A continuación, enjuagar la cara con agua y secar con una toalla limpia.
Este protocolo es recomendable mañana y noche, pero puedes realizarlo también en momentos que hayas sudado mucho o notes la zona irritada.
¿Cuál es la mascarilla más recomendable?
También es importante valorar el tipo de mascarilla que estás usando.
Cuanto más filtrante sea la mascarilla, más va a agravar tu problema. Por lo tanto, es mejor que utilices mascarillas médicas o de algodón, éstas últimas son especialmente recomendables si tienes la piel sensible, pero debes asegurarte de que el tejido es homologado, para garantizar una adecuada filtración.
Las mascarillas médicas son de un sólo uso y conviene cambiarlas a diario. Las de algodón hay que lavarlas a diario a la temperatura que indique el fabricante, en función de las especificaciones del tejido.
Es fundamental el uso de la mascarilla, pero siempre que puedas deja respirar tu piel, quítatela, siempre de las gomas y guárdala en una funda o bolsa, para evitar que entre en contacto con objetos y superficies.
Si has hecho ejercicio o has sudado, desecha esa mascarilla si se trata de una médica o échala a lavar y ponte una nueva y limpia. Ese sudor, más todo lo que arrastra la mascarilla de nuestra piel, es un caldo de cultivo estupendo para bacterias. Además de lo desagradable que puede resultar ponerse una mascarilla sudada y sucia. Debes proceder igual que lo harías con el resto de tu ropa.
¿Y qué tiene que ver el estrés en todo esto?
Pues mucho, cualquier situación de estrés induce la liberación de cortisol y andrógenos, que afectan a la glándula sebácea induciendo su inflamación y la producción de grasa. El hecho de estar pasando una pandemia ha alterado nuestros hábitos de vida, produciéndonos incertidumbre y preocupación, responsables del estrés.
Sé de primera mano que la gestión del estrés es muy difícil, pero es importante intentarlo. Aquí tienes algunos consejos:
Come bien: una alimentación equilibrada que incluya frutas y verduras, legumbres, carne pescado, huevos y cereales integrales. Evita los lácteos, el alcohol y los productos ultraprocesados, que suelen tener excesiva cantidad de azúcar,.
Descansa: un sueño reparador garantiza el buen funcionamiento de nuestro cuerpo, ya que durante es sueño es cuando nuestro cuerpo pone en marcha todos los mecanismos de reparación.
Haz ejercicio de manera regular, ayuda a modular el estrés, ya que reduce los niveles de cortisol.
Llama o queda con un amigo o amiga y cuéntale lo que te preocupa. Seguro que te da buenos consejos que te ayudarán a calmarte. Además pasar un buen rato es la mejor terapia.
Practica meditación, es infalible para relajar el sistema nervioso y gestionar el estrés. Al principio parece complicado, pero si lo practicas de manera regular te irá fenomenal.
Pide ayuda, si por ti sol@ no puedes gestionarlo, recurre a un@ especialista, te dará las herramientas que te ayudarán a conseguirlo.
¿Cuál es la crema y el limpiador que debes utilizar?
Es difícil aconsejarte sin hacerte antes una valoración y establecer un diagnóstico. Así es que te recomiendo que pidas una cita presencial o a través de videoconferencia.
Rellena este formulario para pedirla y olvidarte del acné.
Estaremos encantadas de poder ayudarte.
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